Tal y como ha explicado la concejala de la coalición Mariví Freire, “las obras se iniciaron en agosto del año pasado y, tras sólo 1 mes, se detuvieron los trabajos”. La edil ha denunciado además que con el sobrecoste conocido de la obra, volver a licitarla va a conllevar añadir aún más retraso: “Las obras del comedor del Colegio Rontegi llevan en la actualidad un 43% de sobrecoste y, según la normativa actual, en el momento de superar un 10% el sobrecoste de una obra, ésta debe paralizarse e, incluso, se debe volver a licitar, lo que supone añadir más tiempo de espera”.
Freire ha aclarado además que no poder empezar los trabajos durante las vacaciones escolares implica que las obras van a coincidir en pleno curso, con el alumnado presente en las aulas. “Por no hablar de que habían iniciado ya con una parte de obras en el interior, lo que obliga al Colegio a tener que convivir por muchos más meses con unos accesos temporales adaptados a esa fase de obra, con la consiguiente incomodidad para los cursos de las y los más pequeños”, ha añadido la concejala.
A Elkarrekin le parece lamentable y vergonzoso que una vez más sea la educación pública la que no cuente con unas infraestructuras renovadas y en buen estado, recordando que no disponer de espacios de educación adecuados impacta de manera negativa en el aprendizaje. “Nos preguntamos por qué el Departamento de Educación no ha actuado antes cuando ya fueron conocedores de esta situación desde el año pasado”, han subrayado desde la coalición.