El acto ha contado con la intervención de Eider Gardiazabal Rubial, presidenta de la Fundación Ramón Rubial e hija de Lentxu Rubial y la diputada de Empleo, Inclusión e Igualdad de la Diputación Foral de Bizkaia, Teresa Laespada, y con la presencia del consejero de Planificación Territorial, Vivienda y Transportes, Iñaki Arriola, el alcalde de Ermua, Juan Carlos Abascal, y concejales y concejalas socialistas en los ayuntamientos de Barakaldo, Bilbao y Portugalete. La presidenta de 13 Rosas Rojas, Marisa González, ha hecho las veces de presentadora.
En la entrega de premios se han proyectado varios vídeos y ha actuado la artista Eder Portolés, que ha interpretado canciones reivindicativas y vinculadas con la lucha por la igualdad de las mujeres, como ‘La Puerta Violeta’ de Rozalén.
La Asociación de Mujeres Congoleñas Famek Elkartea destaca por el desarrollo integral y la autonomía de las mujeres migrantes y vascas. Ha logrado crear un espacio de igualdad intergeneracional e interseccional, bajo el lema ‘Caminamos juntas apoyándonos’, y desarrolla numerosas actividades dirigidas a las mujeres, con especial atención a niñas y jóvenes.
Pilar Arenales, por su parte, ha recibido el premio Lentxu Rubial a título póstumo. Licenciada en Farmacia, esta socialista barakaldesa fue una de las pioneras de políticas de igualdad en Euskadi desde sus diferentes responsabilidades. Fue secretaria primera de las Juntas Generales de Bizkaia, negoció las transferencias de sanidad para Euskadi durante la Transición e impulsó los grupos de trabajo en el PSE-EE, donde ejerció de coordinadora de organización.
Por último, los centros regionales de Barakaldo se han llevado el premio en el ámbito local por impulsar la creación de espacios de promoción de la igualdad entre hombres y mujeres en sus organizaciones. Las socias de las 13 entidades que conforman la Federación siempre han tenido un papel relevante, fomentando actividades para conservar la cultura y las tradiciones de sus tierras, y los propios centros se han configurado como puntales de la integración, en pie de igualdad, de las personas llegadas a Barakaldo desde los diferentes puntos de la geografía española.
A los galardonados se les ha entregado una escultura con la imagen de Lentxu Rubial y un ramo de rosas, como se viene realizando en las anteriores ediciones.