La residencia, controlada desde noviembre de 2019 por el Grupo Vitalia Home, ha supuesto la entrada de fondos de inversión y firmas de capital riesgo internacionales, como CVC Capital Partners, en la gestión de residencias del País Vasco y Cantabria, ante la falta de oferta pública: “Este cambio en la dirección de la empresa indica claramente que su objetivo no es atender y cuidar con calidad a personas mayores y dependientes, sino obtener beneficios rápidamente, como en la actualidad en la que ya se ha privatizado la atención del fisio o de la psicóloga. Además, añaden:”Esta firma, como otros fondos buitre ha invertido en empresas de gas, de moda, y desde 2019 ha entrado a invertir en centros residenciales de Bizkaia, como es el caso de la residencia de Bagatza. Todo ello, con el permiso de la Diputación, que es conocedora de este hecho y no pone medidas de control ni inspecciones para evitar el descuido de nuestras y nuestros mayores”.
El colectivo de familias remarca que sin medidas eficaces de inspección y control, sin cambios en el modelo de inspección que se realiza para que se evalúe la calidad de la atención y participen las familias y sin dotar de plantilla suficiente para hacerlas, “es imposible que esto no vaya a peor, ya que las empresas privadas van a continuar con su modelo de negocio ”.
Ante la entrada del nuevo modelo de unidades convivenciales anunciado por la Diputación, tienen claro que “sin hacer autocrítica y corregir las deficiencias del sistema actual no se puede pretender que el nuevo sistema no repita los mismos errores, como tener una plantilla insuficiente y con contratos precarios”.