La movilización ha contado con la asistencia de decenas de personas y durante la misma se han exhibido dos pancartas, una con la frase "¡Que se nos oiga!" y la segunda con la reclamación "La cultura es segura. Los coros son cultura". Además se ha leído el siguiente comunicado:
"Los coros federados de Euskal Herria manifestamos que queremos y necesitamos cantar, que la mayoría de los coros federados estamos desde noviembre de 2020 sin poder actuar o ensayar, que muchos coros ya no volverán a hacerlo porque ya han cerrado sus puertas para siempre. La cultura es segura. Muchas familias viven de nuestras directoras y directores corales, pianistas y profesores de canto".
"Los coros federados queremos denunciar que hemos sufrido una campaña de demonización mediática contra la actividad coral. En la situación actual, para poder cantar con seguridad, como en otras actividades culturales o deportivas federadas, existen unos protocolos de seguridad y unas medidas de protección y acondicionamiento de los espacios consensuados con el Gobierno Vasco".
"No hay actividad cultural, laboral o diaria 100% exenta de riesgo covid. Otras actividades grupales, culturales o deportivas federadas, ya han sido autorizadas. ¿Por qué el canto coral federado no?"
"Si la actividad coral se considera de alto riesgo:
- a) Apliquemos las medidas previstas
- b) Instrumentalicemos modos de controlar su cumplimiento
- c) Modifiquémoslas si se consideran insuficientes"
"No prohibamos el canto coral por sistema. Los coros federados exigimos autorización para poder retomar presencialmente la actividad de nuestros ensayos corales. Nos comprometemos a respetar todos los requisitos de seguridad recogidos en los protocolos corales aceptados por el Gobierno Vasco".
"Los coros federados exigimos ayudas directas para acondicionar o mejorar los espacios de ensayo a las normativas actuales".
"Por últimos, queremos manifestar que cantar es seguro si se respetan las medidas de seguridad".
