La persona intervenida es una paciente de 74 años con artrosis en los tres compartimentos de su rodilla derecha. Tras ser sometida a distintos tratamientos como fisioterapia, infiltraciones de ácido hialurónico y antiinflamatorios, durante los últimos años, no ha sido posible mitigar dicho dolor.
La utilización de la instrumentación robótica para este tipo de cirugía supone un gran avance, al igual que lo supuso en su día, en el campo de la urología. La nueva técnica logrará reducir el 20% de pacientes que no están satisfechos tras su implante de prótesis de rodilla. Ello gracias a las numerosas ventajas que aporta la asistencia por robot.
Una mayor precisión en los cortes, permite personalizar el procedimiento quirúrgico respetando el morfotipo individual de cada paciente. Además, permite en tiempo real controlar y medir la alineación definitiva de la rodilla en relación con la cadera y el tobillo, así como la tensión de los ligamentos tanto en flexión como en extensión
Entre las ventajas, destaca también la trazabilidad del procedimiento quirúrgico, de tal manera que permite en caso de resultado no satisfactorio revisar cada uno de los pasos que se dieron en la intervención. En este sentido, se añade que es una herramienta extraordinaria para la docencia a los médicos y médicas residentes, permitiendo objetivar cada una de decisiones que se toman a la hora de orientar el implante protésico.
Las prestaciones del robot incluyen un estudio exhaustivo del proceso prequirúrgico, gracias a la reconstrucción en 3D de la rodilla previa a la intervención. la nueva tecnología permite al cirujano realizar un ensayo en el ordenador de dicha cirugía, adelantándose y pudiendo prever las dificultades que pudieran aparecer en el acto quirúrgico
El implante utilizado es el mismo que se utiliza habitualmente en el Hospital Universitario Cruces. La intervención guiada por robot y la reconstrucción en 3D de la rodilla previa a la intervención sitúan al Hospital como referencia a nivel nacional, en un tipo de cirugía que con el tiempo será la norma o al menos en los casos más difíciles o personas jóvenes donde es tan importante la adecuada colocación del implante, no solo para no perder funcionalidad respecto de la otra rodilla, sino también alargar la vida de uso, lo que sin duda se reflejará tanto en los estándares de calidad como económicos, disminuyendo el número de futuras revisiones
Plataforma ICHOM
Al hito que supone esta nueva herramienta en la mejora de la cirugía, debemos mencionar otro recurso no menos importante. Se trata de la incorporación de la Unidad de Rodilla en la plataforma ICHOM para el seguimiento de la artrosis de rodilla incluido el proceso quirúrgico.
Esto supone que va a existir un estrecho seguimiento del paciente con artrosis de rodilla desde su diagnóstico hasta dos años después de la cirugía. Dicha evaluación no sólo va a permitir evaluar los resultados de la operación, sino también identificar si el momento de la misma fue el adecuado. Para ello se utilizan las mismas escalas funcionales de valoración, lo que permite compararnos y así buscar puntos de mejora.
La plataforma ICHOM integra importantes hospitales repartidos por todo el mundo, y abarca otros procesos de distintas especialidades como la intervención por cataratas o el cáncer de próstata
* Enlace al texto en la web de origen
Este texto es un comunicado de la organización sanitaria integrada Enkarterri Cruces de Osakidetza
