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BarakaldoComercial | El Orense II vuelve a casa

Reinauguración del Orense II
Félix López (76 años) y Marina García (78) siguen al pie del cañón como cuando hace 42 años llegaron de Francia para instalarse en Barakaldo e iniciaron de inmediato en Retuerto una actividad, que con el nombre de Orense por bandera, les ha convertido en testigos y referencia imprescindible del barrio. En el bar se juntan tres generaciones para reinaugurar un local que la familia abrió hace ahora dos décadas. El Orense II vuelve a ser gestionado directamente por los López García, esta vez con su hijo, José, al frente. El local está junto al Orense, el establecimiento hostelero original, que sigue en actividad en el callejón del que nadie sabe el nombre, junto al patio de la iglesia, y que Marina y Félix pusieron en marcha en 1975, cuando Altos Hornos de Vizcaya funcionaba todavía a pleno ritmo.
Reinauguración del Orense II
Mariana y Félix, con su nieto
"La miseria", cuenta Félix López, les había obligado, como a decenas de miles de personas, a emigrar a Europa desde la España empobrecida y gris de la postguerra. En los sesenta, López, a través de un pariente, se marchó a Francia por 10 años a trabajar, primero a Las Landas y después de París, a la construcción. "Lucha y lucha todo el tiempo", recuerda de aquellos tiempos "muy duros". Cuatro años después, se trasladó también su mujer, Marina García, al país vecino, como costurera —recuerda las cortinas que colocó en el hotel de la torre de Montparnasse—. En Galicia quedó José, su único hijo, al cuidado de la familia. El matrimonio sabe lo que es trabajar. En ocasiones, jornadas de más de 20 horas, para salir adelante. "No me arrepiento", dice López. El esfuerzo en la capital francesa les permitió el regreso con un pequeño capital con el que compraron el piso y el local del que sería el bar Orense. El primer medio año lo intentaron en el restaurante del Centro Gallego, pero no funcionó y abrieron el local de Retuerto.

Reinauguración del Orense II
Clientes en el Orense II
Los trabajadores de Altos Hornos de Vizcaya llenaban el bar desde primera hora. En torno a las cinco de la mañana, ya estaban en marcha para atender a los que entraban o salían del turno de la fábrica. Eran tiempos en las cuadrillas de chavales podían ser de 20 y 30 personas, recuerda García. Se vendía mucho vino y, en el comedor, la clientela tenía pinchos y platos combinados. También preparaban pulpo con cachelos. No hacía falta ir a Galicia para comerlo.

El matrimonio no cerró el bar ni un día en 19 años, salvo los días de vacaciones de agosto. Marina García, con un delantal como el que todavía muestra en el bar que ahora lleva su hijo, atendía el Orense, y su marido, Félix López, se incorporaba cuando salía de trabajar en la fábrica de Montero Fibras y Elastómeros. Jose llegó a Barakaldo con sus padres cuando apenas era un adolescente, con 12 años, y la hostelería ha sido desde ese momento su vida.

La familia ha trabajado sin descanso durante décadas y el esfuerzo se ha traducido en tres locales hosteleros en Retuerto. Además de los Orense I y Orense II —abierto en 1995—, también tienen, cedida en alquiler, la cafetería Erreka-Ortu, que inauguraron en 2001.

Marina y Félix, pensionistas, viven entre Retuerto y la casita del pueblo, en Orense, con sus naranjos. Pero la suya no es una jubilación pasiva. "Estaremos detrás echando una mano", señalan en referencia a su hijo y a la nueva etapa del Orense II. Han rehabilitado por completo el bar y su hijo, José, ha recuperado los pinchos y platos combinados para volver a ser, como siempre fueron los locales de los López García, el "bar del barrio".