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Berri-Otxoak denuncia recortes sociales mientras aumentan los sueldos de los ediles

chorizada de Berri-Otxoak en Rontegi contra los recortes
La plataforma contra la exclusión social Berri-Otxoak ha denunciado los recortes sociales aplicados por el equipo de gobierno municipal (PNV) del Ayuntamiento de Barakaldo, mientras se incrementa la partida presupuestaria destinada a los sueldos de los concejales y personal liberado. Berri-Otoak ha criticado que se destinen 980.000 euros para las ayudas que reciben 1.300 familias, mientras la partida para sueldo de los 27 corporativos y el personal liberado de los partidos sea de 1,5 millones de euros.

La plataforma ha celebrado este domingo 16 en Rontegi, durante las fiestas del barrio, su tercera chorizada popular contra los recortes en la que ha repartido más de 2.000 pinchos de chorizo. Bajo el lema “No hay pan para tanto Txorizo”, Berri-Otxoak ha denunciado los recortes sociales en un barrio en el que 200 familias que perciben las ayudas económicas municipales.

Ha criticado que el pacto presupuestario entre PNV y PSE suponga incrementar la partida para sueldos de concejales y personal liberado y ha destacado que la alcaldesa Amaia del Campo (PNV) percibe sus retribuciones a cargo de las arcas públicas desde hace 21 años, como concejal, apoderada de las Juntas Generales y ahora como alcaldesa, con 74.307,38 euros de salario base y 13.909,45 euros en cotizaciones.


Comunicado
En el contexto de las fiestas populares del barrio barakaldés de Rontegi se desarrollará la “Tercera Txorizada Popular”; que consistirá en el reparto de más de 2.000 pinchos de chorizo.

Bajo el lema “No hay pan para tanto Txorizo” se denunciará que el equipo de gobierno recorta las prestaciones sociales destinadas a las miles de familias afectadas por la actual situación de crisis económica en la localidad.

Hay que tener en cuenta que el gobierno municipal ha decidido suprimir el “Servicio de Urgencias Sociales”.

Además de reducir la cuantía a percibir por las familias para hacer frente a sus carencias. En concreto, en un tercio la ayuda para alquileres; en un 9% para hipotecas; un 17% para los gastos sanitarios no cubiertos por Osakidetza; o en un 10% las ayudas para necesidades básicas como alimentación, vestuario y educación.

Por otro lado, el Departamento de Acción Social ha decidido reducir hasta su mínima expresión las ayudas destinadas para el mantenimiento de la vivienda habitual; o para los gastos de adaptación y reparación de las instalaciones básicas de la comunidad.

Recortes que afectan a las 417 personas desempleadas del barrio de Rontegi (de las cuales el 58% son mujeres; en concreto 241); las 243 familias perceptoras de las prestaciones gestionadas por Lanbide; o las 200 familias que perciben las ayudas económicas municipales.

Cabe recordar que el pacto presupuestario alcanzado entre los partidos PNV y PSE ha supuesto ampliar las retribuciones de Alcaldesa, corporativos, cargos liberados y asesores municipales; remuneraciones que suponen a las arcas del consistorio 1’5 millones de euros al año.

Sin embargo, el presupuesto destinado a las ayudas sociales es de 980.000 euros; de las cuales dependen 1.300 familias barakaldesas. Por lo que no es casualidad que en tan solo un solo año se incremente en un 23% el número de personas derivadas por el consistorio fabril al comedor social de Cáritas, por su imposibilidad de poder cubrir una comida diaria.

¿Para qué y para quién no hay dinero?

Por este motivo, esta iniciativa surge para denunciar que el gobierno municipal sigue recortando las ayudas sociales mientras incrementa la partida presupuestaria destinada a los sueldos de los corporativos a sueldo del consistorio. Mientras se congela el presupuesto destinado a protección social y se endure los requisitos de acceso a las ayudas de emergencia social.

La alcaldesa de Barakaldo, Amaia del Campo, cobra más que algunos de los ministros del gobierno de Pedro Sánchez; o presidentes de comunidades autónomas como Andalucía, Murcia o Valencia. Además, su sueldo es superior al de mandatarios de ciudades como Sevilla (siete veces más de población) o Vigo (que triplica en residentes a la localidad fabril).

Hay que tener en cuenta que desde hace 21 años la actual alcaldesa de Barakaldo, Amaia del Campo, percibe sus retribuciones a cargo de las arcas públicas: como concejala liberada; apoderada de las Juntas Generales; y ahora de alcaldesa. En la actualidad supone la friolera de 88.216,83 euros anuales: 74.307,38 de salario base; y 13.909,45 euros en cotizaciones.