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Gobierno Vasco convertirá 11 lonjas vacias de Barakaldo en viviendas de alquiler social

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Gobierno Vasco convertirá 11 lonjas de su propiedad en Barakaldo en viviendas de alquiler social. El consejero de Medio Ambiente, Planificación Territorial y Vivienda, Iñaki Arriola (PSE), ha presentado un programa piloto para transformar bajos comerciales en desuso en pisos sociales y alojamientos dotacionales. En ese plan se recoge 11 viviendas en Barakaldo, cuatro en una primera fase y siete en una segunda.



Nota de prensa del Gobierno Vasco

El Departamento de Vivienda convertirá locales vacíos en viviendas de alquiler social


El proyecto creará 45 nuevas viviendas sociales en lonjas ubicadas en edificios del Gobierno Vasco repartidos en nueve localidades

El consejero Arriola ha destacado que la conversión de estos locales en desuso, además de contribuir a la oferta pública de alquiler, ayudará a la revitalización del espacio urbano



El consejero de Medio Ambiente, Planificación Territorial y Vivienda, Iñaki Arriola, ha presentado hoy un programa piloto por el que el Departamento va a convertir bajos comerciales en desuso en viviendas sociales y alojamientos dotacionales. La iniciativa persigue un doble objetivo: proporcionar viviendas a colectivos que no pueden acceder al mercado ordinario y revitalizar el espacio urbano de Euskadi.

Un estudio exhaustivo realizado por el Departamento de Vivienda ha identificado un centenar de lonjas desocupadas situadas en las plantas bajas y entreplantas de edificios del parque residencial del Gobierno Vasco. Estos locales son fruto del planeamiento urbanístico en vigor en el momento de su construcción, pero no han encontrado a lo largo del tiempo el uso terciario al que estaban destinados por falta de demanda.

El estudio ha analizado la normativa urbanística municipal así como las características de los locales, seleccionando a partir de las conclusiones de dicho análisis aquellos en los que la habilitación como vivienda o alojamiento dotacional es viable o puede serlo en un futuro próximo. Con estos datos, el Departamento de Vivienda ha puesto en marcha un plan para sumar 45 nuevas viviendas de carácter social, en nueve localidades de la geografía vasca.

La primera intervención se va a llevar a cabo en Bilbao, más concretamente en las calles Santutxu e Indalecio Prieto, con la conversión de cuatro locales en tres viviendas, una de ellas adaptada a personas con movilidad reducida. El presupuesto conjunto de la actuación asciende a 283.000 euros.

La licitación para la ejecución de las obras es inminente y se espera que la construcción de dichas viviendas se inicie este mismo año. El diseño del proyecto lo ha llevado a cabo el estudio de los arquitectos Cristina Acha y Miguel Zaballa, que también han editado una guía con recomendaciones para adaptar con éxito el proceso de conversión de los locales, con sus particularidades y características, en viviendas. La guía estará incluida en los pliegos para futuros proyectos de este tipo promovidos por el Departamento. Y es que los bajos o lonjas a pie de calle presentan una serie de condicionantes específicos asociados a su destino en origen, razón por la que, en su reconversión como viviendas, precisan de un planteamiento y diseño especialmente cuidados, sobre todo en cuestiones como el confort, la accesibilidad, la privacidad o la seguridad.

A lo largo de este mes, además, se van a licitar los proyectos de otras 12 viviendas repartidos en cuatro lotes: Barakaldo (cuatro viviendas sociales), Elgoibar (cuatro viviendas sociales), Portugalete (dos alojamientos dotacionales) y Vitoria-Gasteiz (dos alojamientos dotacionales).

En una segunda fase se pondrán en marcha otras 30 viviendas, en municipios como Barakaldo, Bilbao, Arrigorriaga, Santurtzi, Sestao o Lekeitio.

El consejero Arriola ha destacado que, aunque la iniciativa tiene como objetivo principal contribuir a la oferta pública de alquiler, existe también una dimensión urbana en la estrategia.“El rescate de estos locales en desuso, al tiempo que reactivan un patrimonio inutilizado, sirven como herramienta de revitalización del espacio urbano”.

“Todos conocemos –ha añadido– barrios nuevos y viejos de nuestros pueblos con edificios llenos de lonjas tapiadas que sabemos que nunca van a convertirse en comercios o negocios. Unos espacios que, en muchos casos, son susceptibles de transformarse en viviendas, especialmente para personas jóvenes”. Y ha animado a los Ayuntamientos a que hagan la misma reflexión.