"Al menos un año y medio" se retrasará "la resolución de los problemas de accesibilidad" de la estación de tren de Renfe en Desierto. Así lo ha anunciado la alcaldesa de Barakaldo, Amaia del Campo (PNV), que ha acusado a la empresa pública ferroviaria Adif de rechazar de momento instalar dos ascensores a los andenes en la pasarela que construirá el Ayuntamiento, por encima de las vías, para conectar los barrios de Desierto y el centro. En concreto, Del Campo sostiene que Adif ha "renunciado a acompasar" la obra del paso elevado con la eliminación de las barreras arquitectónicas a los andenes. Sin embargo, la alcaldesa asegura que esta decisión de la empresa ferroviaria no supondrá ningún retraso más a las obras de la pasarela del Ayuntamiento.
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Nota de prensa del equipo de Gobierno municipal (PNV)
Las obras de la pasarela que unirá Murrieta con Urban-Galindo se iniciarán esta semana
- Los trabajos comenzarán en la calle Paseo El Ferrocarril con la contracción de la rampa peatonal y el ascensor que dará acceso a la propia pasarela
- La estación de ADIF de la calle Murrieta quedará inhabilitada durante dos meses en el transcurso de la obra
Las obras para construir la pasarela entre Murrieta y Urban-Galindo se iniciarán esta semana. El Ayuntamiento de Barakaldo acaba de firmar el inicio formal de los trabajos con el Acta de Replanteo que permitirá a la empresa adjudicataria comenzar con esta esperada actuación.
Los trabajos se iniciarán en la calle Paseo El Ferrocarril, con la construcción de la rampa de 41 metros que dará acceso a la pasarela peatonal. Este es uno de los dos accesos con los que contará la pasarela desde el barrio de Urban-Galindo, el otro fue introducido con el equipo de gobierno y consiste en un ascensor que evitará que las vecinas y vecinos con mayores problemas de movilidad deban caminar hasta la rampa para cruzar la pasarela.
Según los responsables de la obra, durante la construcción de este tramo de obra no se provocarán incidencias en el tráfico, aunque sí se ocupará la acera paralela a las vías del tren y las correspondientes plazas de aparcamiento.
La obra continuará en la calle Murrieta, probablemente a inicios de año, con la realización de las bases que sostendrán la pasarela. Así, se reiniciará la construcción del acceso y se elevará un pilar junto a la estación. Más allá de las particulares molestias de una obra, el tráfico rodado tampoco se verá afectado. Sin embargo, el transcurso de las obras obligará a que la entrada a la estación por Murrieta quede inhabilitada durante dos meses, por lo que el único acceso que se quedará en funcionamiento será el del barrio de Urban-Galindo.
Una vez construidas las bases de la plataforma se procederá a la colocación de la propia pasarela. Un taller elaborará los módulos y durante una o dos jornadas se trasportarán en grandes camiones hasta Barakaldo para su instalación. El Ayuntamiento anunciará a su debido tiempo las afecciones que esta operación pudiera causar en el tráfico de la zona.
La nueva pasarela que unirá Murrieta y Urban-Galindo se concluirá antes de que finalice 2017, se trata de una actuación muy compleja debido a que debe trabajarse sobre las vías del tren.
“Esta es una gran noticia para las vecinas y vecinos de Barakaldo, ya que se trata de una obra muy esperada que ha ido afrontando diferentes complicaciones. Por fin ha llegado el día en el que podemos anunciar que el barrio de Urban-Galindo va a poder comunicarse con el centro de la ciudad sin tener que atravesar un túnel subterráneo”, ha explicado Amaia del Campo, alcaldesa de Barakaldo. “Esta obra va a suponer una gran mejora en la seguridad de los barakaldeses y, sobre todo, de las barakaldesas, ya que nos permitirá cerrar de una vez por todas el túnel de Renfe”, ha indicado la alcaldesa.
MODIFICACIÓN EN EL PROYECTO
El proyecto de la pasarela ha sufrido un cambio en lo que le corresponde al Administrador de Infraestructuras Ferroviarias Adif (ADIF). Según le ha comunicado ADIF al Ayuntamiento, renuncia a la oportunidad de acompasar la obra para mejorar la accesibilidad en la estación de Desertu con la instalación de dos ascensores que conectasen directamente la pasarela con los andenes. Es decir, Adif realizará la obra pero manejando sus propios tiempos y resolviendo la accesibilidad desde el interior de la estación, sin conectarse a la pasarela. “Respetamos la decisión de Adif, pero consideramos que este cambio influye de manera negativa en las barakaldesas y barakaldeses, así como en las usuarias y usuarios del tren, ya que supondrá un retraso al menos de año y medio en la resolución de los problemas de accesibilidad”, ha finalizado Del Campo, quien ha remitido un escrito al Adminitrador de Infraestructuras Ferroviarias llegar que la propuesta inicial contaba con la aceptación de las vecinas y vecinos de Barakaldo.
