Un dedo roto en un adulto —con la correspondiente baja médica— y una brecha en la cabeza en un niño de corta edad. Son los últimos heridos, por caídas, que ha provocado el estado en que se encuentra la calle San Roque en el barrio de El Regato. Los vecinos denuncian que el
Ayuntamiento de Barakaldo no realiza labores de mejora del firme desde "hace años", lo que ha provocado que actualmente esta estrecha vía sea un punto lleno de gravilla que se vuelve peligrosa debido a la fuerte pendiente —es la calle de ascenso a Tellitu—, lo que ha provocado caídas entre la decena de familias residentes en la zona. El asunto ha sido comunicado al consistorio pero la respuesta es confusa. Han recibido como respuesta, según el día de llamada, que hay proyecto de mejora y que no lo hay. Los vecinos temen que sí se hagan labores pero sólo para poner parches en lugar de una intervención integral. El estado general de la calle revela los problemas de mantenimiento: barandillas en zona pública podridas, fuga permanente de agua, farolas cubiertas por la suciedad, falta de aceras, vehículos que descienden a velocidad inadecuada o yerbas descontroladas. Los vecinos lamentan la situación de "abandono" de la calle, que contrasta con el estado de la vía pocos metros más abajo, donde funciona uno de los locales hosteleros del barrio.
