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Bildu denuncia el "excesivo" peaje de la Supersur, una infraestrutura con "un gran impacto ambiental"



Bildu ha denunciado que la apertura de la Variante Sur Metropolitana va a suponer "un gran impacto ambiental" en los pocos ámbitos naturales que quedaban en Bilbao y la Margen Izquierda, como El Regato, y ha mostrado su temor a que se convierta en una infraestructura infrautilizada con un peaje "excesivo", sobre todo para los transportistas autónomos que estarán obligados a utilizar esta vía que se abrirá al tráfico este sábado, que es "meramente recaudatorio". Para Bildu la política de movilidad de la Diputación Foral de Bizkaia "ha estado y sigue basada en una construcción indiscriminada de más y mayores carreteras".
Nota de prensa
Bildu: “La única apuesta en movilidad de la Diputación es construir indiscriminadamente más y mayores carreteras”

Ante la inminente apertura de la Variante Sur Metropolitana, BILDU manifiesta lo siguiente: · A primera vista, desde un punto de vista medioambiental, la apertura de la Variante Sur Metropolitana (Supersur) supone un gran impacto ambiental que ha originado destrozos en los pocos ámbitos naturales que se mantenían casi intactos en Bilbo, Ezkerraldea y Meatzaldea. Ejemplos claros son cómo ha quedado el Pagasarri o Errekatxo-Regato, por no hablar del impacto visual y paisajístico, la contaminación acústica o la polución del aire. El cánon, por ejemplo, no responde a criterios medioambientales o no se recogen los costos que suponen para la salud de las personas, como se hace en la mayoría de países de Europa, su carácter es meramente recaudatorio para su gestión y mantenimiento. El daño irreparable en el medio ambiente y en las arcas públicas está hecho pero, cuando menos, exigimos una gestión pública y directa. · Además, su construcción es también insostenible desde el punto de vista económico. Se ha ejecutado sin un previo debate social, sin ser respaldada por una mayoría cualificada y sin contar con informes técnicos que avalen su utilización. ¿Si no están claros los beneficios en el tráfico rodado, si no está debidamente justificada su utilización, ni su carácter disuasorio, ni su efectividad para reducir el volumen del tráfico, a qué intereses responde su construcción? Recordemos que su aprobación vino tras haber debatido el PTS de carreteras en el que no se veía la necesidad de esta nueva carretera. Otro dato, el tráfico de la A8 responde en un 68% al tráfico de agitación -entre municipios internos-, un 26% al de penetración y sólo un 6% al de travesía, tráfico éste al que responde esta infraestructura. Defienden desde Diputación que el tráfico de mercancías irá por esta vía, mismo argumento utilizado para justificar la construcción del TAV, ¿en qué quedamos? Mucho nos tememos, que al igual que ha pasado con los túneles de Artxanda, o en el territorio vecino con la Eibar-Gasteiz, las previsiones de uso manejadas por Diputación no se lleguen a alcanzar y se convierta en una infraestructura infrautilizada. Además de los millones de euros que ya nos ha costado -su coste total se sitúa entre 1'5 y 2 millones de euros- deberemos asumir el agujero que suponga su explotación y mantenimiento. · Por otro lado, la propia situación socioeconómica que atraviesa el territorio obliga a un replanteamiento de aquellas apuestas en macroinfraestructuras realizadas en tiempos de bonanza. ¿Hay que seguir con todo? Miremos a Iparralde donde se están cuestionando la necesidad del Tren de Alta Velocidad o, sin ir tan lejos, tenemos el ejemplo del puerto de Pasaia donde incluso sectores que antes lo veían necesario opinan que existen alternativas más sostenibles económica y mediambientalmente. La Supersur, tal como ha sido planteada, no era una infraestructura imprescindible ni antes ni ahora, es hora de replantearse, también en Bizkaia, esta apuesta por el cemento y el asfalto, más aún con la grave situación socioeconómica que estamos viviendo en el territorio. Se está hipotecando el futuro de Bizkaia debido al endeudamiento que suponen estas nuevas infraestructuras. · Desde Diputación no se ha actuado con rigor en el tema del cánon. Al principio se hicieron unas previsiones exageradas y abusivas, luego se utilizó el peaje de la A8 para su financiación - algo ilegal- y luego se ha ocultado y retrasado hasta después de las elecciones el elevado coste del peaje. Es excesivo el peaje para los camiones de hasta 6'74 euros, sobre todo para aquellos transportistas autónomos que han de utilizar constantemente esta vía. · La política de movilidad de la Diputación Foral de Bizkaia ha estado y sigue basada en una construcción indiscriminada de más y mayores carreteras. Pero se ha conseguido justo lo contrario: hoy en día el corredor del Txorierri debido a su volumen de tráfico y al número de accidentes se ha convertido en uno de los mayores puntos negros de nuestras carreteras, el volumen de tráfico de la Eibar-Gasteiz está muy lejos de los cálculos iniciales, por no hablar del fraude cometido a la ciudadanía con los túneles de Artxanda. Con la Variante Sur Metropolitana, mucho nos tememos que ocurrirá lo mismo. Es necesario atajar el problema de la movilidad desde una visión integral, superando la desordenación territorial aplicada desde las instituciones, la ineficaz política de transporte público, la construcción indiscriminada de urbanizaciones fuera de los núcleos urbanos, la proliferación de grandes centros comerciales, la incompetencia institucional para instaurar el Billete Único... Ante las grandes obras realizadas sustentadas en intereses de unos pocos sin considerar las verdaderas necesidades de los ciudadanos es necesaria una nueva política de movilidad. Debemos analizar qué volumen de tráfico puede soportar nuestro territorio y en base al mismo diseñar las formas de minimizarlo impulsando el uso del transporte público, mejorando el transporte de cercanías y por supuesto considerando las políticas ambientales. La necesidad o no de nuevas infraestructuras viarias ha de partir tras un debate amplio y participativo que tenga en cuenta a la ciudadanía, donde se valoren las diferentes alternativas y se llegue a consensos para efectivamente lograr un modelo de movilidad sostenible medioambiental y económicamente.