El aseo se instalará junto al nuevo frontón cubierto. Para ello se construirá una nueva toma de agua que deberá ser conectada a la red de saneamiento. Se trata de unos trabajos de fontanería y obra civil importante lo que supone que el importe de la instalación sea mayor.
La cabina mantendrá el estilo de los baños públicos instalados actualemnete en la ciudad. En uno de sus laterales se instalarán 3 urinarios autolimpiables de acero inoxidable, protegidos con un biombo de acero inoxidable. El exterior de la cabina será de gresite en colores acordes con el entorno. El interior será completamente accesible, adecuado para el uso de cualquier persona, autolimpiables con sistema de desinfección automática en el inodoro.
Tampoco faltará la alarma acústica que avise una vez rebasado el tiempo límite de uso de 15 minutos, indicadores luminosos exteriores del estado del aseo (libre, ocupado, en limpieza) mediante leds de colores, así como las instrucciones de uso grabadas sobre las placas de acero inoxidable, que estarán en el exterior y el interior de la cabina en euskera, castellano y braille.
La obra comenzará una vez se formalice el contrato, ahora en concurso público. El plazo de ejecución estimado es de tres meses.
“La dotación de baños públicos en los barrios es una medida que se hemos impulsado, sobre todo desde el estallido de la pandemia cuando hemos comprobado la importancia que tiene para las personas poder contar con espacios públicos de este tipo en la calle, sin necesidad de entrar en otros equipamientos, hostelería…. Además precisamente la instalación de más baños públicos en la ciudad fue una de las propuestas más votadas en los Presupuestos Participativos, lo que demuestra el interés de la ciudadanía por estos equipamientos”. De hecho es la , ha recordado Jon Andoni Uria, concejal de Obras y Servicios para los Barrios y la Ciudad. En los últimos años hemos instalado aseos públicos en El Regato, Cruces, la zona de Munoa y Gorostiza, además de este próximo equipamiento en Burtzeña.