Por ejemplo, este es el caso de un joven motorista, el cual murió en 2019 al impactar contra un guardarrail en la autopista AP-8 a la altura de Barakaldo, a pesar de que este terrible accidente haya tenido lugar, el ayuntamiento no ha tomado la iniciativa de modificar los quitamiedos. Y, por desgracia, no es un caso puntual; en todas las noticias de este tipo que he leído, solo mencionaba en una de ellas que se estaban instalando otro tipo de barreras.
Además, en 2007, el Gobierno anunció que se modificarían los quitamiedos, pero a día de hoy, más de una década después, no se ha cumplido ese decreto y lamentablemente sigue habiendo fallecidos. Por esta misma razón, opino que es necesario adaptar estas barreras para evitar estos trágicos sucesos. Ya que, si no se hace, muchos motoristas inocentes seguirán siendo mutilados por ellos. Porque… ¿no merece la pena invertir una considerable cantidad de dinero, con tal de evitar fallecimientos de personas que tan solo se limitan a transportarse en un vehículo de dos ruedas?
Gracias por leer mi opinión, un cordial saludo.
Atentamente, Iraia Fernández Cascudo