“Nuevamente, la actuación ha sido posible gracias a la colaboración ciudadana. Vemos que está surtiendo efecto el consejo que estamos dando para que cuando se tenga algún indicio de que se va a ocupar una casa ilegalmente se avise de inmediato a la Policía Local. Actuar con rapidez es fundamental en estos casos”, ha recordado el concejal delegado de Seguridad Ciudadana y Protección Civil, Ángel Madrazo.
Fue la persona que acababa de dejar de habitar la vivienda quien dio la voz de alarma a la Policía Local durante la mañana del pasado martes. En concreto, relató que mientras retiraba los últimos enseres se han personado en el inmueble dos varones amenazando con ocuparlo durante esa misma tarde.
VIGILANCIA Y TAPIADO
La Policía Local organiza entonces una vigilancia intensiva en la zona, con patrullas a pie. Y, en colaboración con la Ertzaintza, durante la tarde y la noche del martes frustra dos intentos de ocupación por parte de dos hombres, que son identificados. En una de las ocasiones, estas personas llegan a acceder a la vivienda mediante la fractura y cambio de la cerradura, pero son desalojadas de inmediato.
Dado que no es posible mantener una patrulla de forma permanente en la zona por la escasez de agentes en la plantilla, la Policía Local contacta con la persona que ocupaba el inmueble anteriormente para pedirle que tabique la entrada al inmueble y disuadir así a los delincuentes. Sin embargo, esta persona no tiene medios económicos y, además, sobre el inmueble pesa un contencioso judicial que aún está pendiente de resolución.
Ante esta situación, el área de Seguridad Ciudadana y Protección Civil contacta con los servicios municipales para tapiar la vivienda e impedir el acceso a la misma, lo que se realiza en la tarde de ayer.
